Al final la experiencia propia o ajena y los sabios consejos de algunos nos ayudan a ir superando estas preguntas.
Sin duda el cuerpo del hombre es el que más transformaciones visibles puede experimentar cuando está desnudo, en gran parte por las erecciones, puesto que una mujer que esté excitada seguramente lo podrá disimular mejor que un hombre (y aún así somos la mayoría hombres los que acudimos a playas nudistas...). Incluso el pene de un hombre puede tener distinta morfología con el prepucio retraído o cubriendo el glande.
Pues bien, yo voy a plantear una duda que también he pensado en alguna ocasión: ¿es mejor tomar el sol con el glande al descubierto? ¿o mejor cubrirlo?
La pregunta la planteo como "qué es mejor", bajo un análisis de pros y contras. Obviamente que cada uno haga lo que quiera (o pueda), puesto que es una opción personal y propia.
El tema es que el glande, personalmente, siempre lo he considerado como algo muy íntimo e incluso me atrevería a decir sexual. Para los que no estamos circuncidados y todavía conservamos el prepucio, la tendencia habitual es tenerlo oculto, puesto que la piel, tarde o temprano y por los movimientos del cuerpo, acaba recubriéndolo. Es más, debido a eso diría que pocas personas han visto mi glande en toda mi vida: mis padres y mi mujer, y nadie más, por lo que le da al glande esa condición de exclusividad. Incluso en las duchas del gimnasio, me puedo higienizar y asear el glande, pero al salir de la ducha siempre está bien escondidito.
Pero también tenemos la otra posición, como por ejemplo la de las personas circuncidadas, que no tienen otra alternativa que mostrar su glande cuando van a una playa nudista. Se tendrán que poner crema para que no se les queme (digo yo), y no por mostrar el glande están mostrando nada "exclusivamente íntimo y personal", puesto que cuando están desnudos muestran su glande permanentemente.
Es más, por higiene, y me refiero a los hombres con prepucio, se dice que es saludable que el glande se limpie con agua de mar, y que también se airee para que la zona no se irrite.
De hecho, se dice que el glande de las personas circuncidadas pierde sensibilidad respecto al de una persona con prepucio. Es por eso que dejar mi glande al descubierto en una playa quizá me podría proporcionar nuevas sensaciones: que la suave brisa lo acaricie, que el agua de mar lo envuelva, que se me pringue con arena...
¿Entonces? ¿Cubierto o descubierto? ¿Enseño la cabecita o la escondo?
Creo que lo tengo claro: haré lo que me apetezca cuando me apetezca.